domingo, 18 de mayo de 2008

Y me dejé llevar por la suave melodía
mientras mi alma volaba
como pluma suavemente mecida
por el soplo del viento.


Y me pierdo en el sonido de la música
capaz de destruir timpanos
tal fuerza me hace recordar
lo nunca vivido.

Y la nicotina ingresa ami cuerpo
y alivia lo dolido
talvés solo lo anestecia,
pero ¿qué importa?
ya no me duele
todo se hace ligero
y de pronto
puedo dejar mi cuerpo.

No hay comentarios: